Antofagasta, 9 de junio de 2025 – En lo que se perfila como un movimiento estratégico de la Municipalidad de Antofagasta, fuentes cercanas al Concejo Municipal revelan que el Director de Control, Alejandro Poblete Román, sería removido de su cargo para ser reasignado a la Dirección de Administración y Finanzas, departamento de contabilidad. Esta decisión, que figura como el punto número uno en la tabla del Concejo Municipal de mañana martes, 10 de junio, ocurre tras semanas de intensa polémica que han marcado la gestión del alcalde Sacha Razmilic, incluyendo el bullado caso CMDS y, más recientemente, el controvertido y fallido contrato de barrido de calles.
La sorpresiva reubicación de Poblete no parece ser un hecho aislado. Se da en un contexto de fuertes roces y “dimes y diretes” públicos entre el Director de Control y el administrador municipal, Rafael Castro, especialmente por la frustrada licitación para el servicio de barrido de calles. Esta licitación, que intentaba adjudicar a una empresa que presuntamente no cumplía con la experiencia, duración de contrato, maquinaria ni contrato colectivo requeridos, generó un escándalo que puso en jaque la credibilidad del proceso municipal.
La tensión escaló con una polémica que trascendió a través de correos electrónicos internos, donde el administrador municipal habría aludido a la Dirección de Control como responsable de la fallida propuesta. Alejandro Poblete, conocido por su rol fiscalizador, reaccionó exigiendo una retractación pública y defendiendo la labor de su unidad, afirmando que fue gracias a su intervención y al apoyo jurídico de la directora subrogante que se alertó al Concejo Municipal sobre las deficiencias, salvaguardando así los intereses de la comunidad. Esta confrontación interna, sumada al desmentido de Poblete sobre su apoyo inicial a la empresa en cuestión, subraya las presiones y divisiones dentro del aparato municipal.
En su reemplazo, se propondría el nombramiento en comisión de servicio de Yesenia Monsalez, proveniente del Tercer Juzgado de Policía Local, quien asumiría la Dirección de Control por un periodo de tres meses. Este cambio, rápido y significativo, genera interrogantes sobre si la polémica y el estancamiento del contrato de barrido de calles fueron el detonante principal de la reasignación de Poblete. La Municipalidad de Antofagasta enfrenta así no solo desafíos operativos en la limpieza de sus calles, sino también una profunda reestructuración interna que podría interpretarse como una toma de responsabilidades o un intento de reordenamiento estratégico en un periodo crítico para la administración Razmilic.
El Concejo Municipal de mañana será clave para observar cómo se desarrolla esta situación y si se brindarán explicaciones transparentes sobre las razones detrás de este importante movimiento de personal en un área tan sensible como la de Control Interno.
